Nuevo curso de humanidades.

Como decía Riwel esta tarde, vamos a plantearle un nuevo curso de humanidades a la universidad: "como comprometerte a algo Y cumplirlo". En serio, tras este fin de semana no se si sacar la escopeta cual Michael Douglas en Un día de furia, o acaso liarme a gritar hasta joderme (más) la garganta o que hacer.
De verdad, ¿tan díficil es cumplir los compromisos previos? Es que encima, lo que más me jode, es que la gente luego te trata como si te hiciese un favor por dejarte más tirada que una colilla. Y lo peor no es eso, porque cuando sólo te dejan tirada a tí, fastidia pero poco más. El problema es cuando no es ante tí ante quien responden, sino ante una tercera persona a la que has dado tu palabra. Porque ahí no es sólo que te dejen tirada, sino que te hacen quedar de pena. Y, sinceramente, si hay una cosa que valoro es mi honor y mi reputación.
Y es que, la gente, al final, parecen críos chicos a los que hay que explicarles el significado del término "responsabilidad" y del término "compromiso".
Como siempre, esto al final será hablar por hablar pero, al menos, me he desahogado un poco.