lunes, octubre 29, 2007

Sonreir.

El otro día escribí un post sobre las ganas que dan, a veces, de llorar sin motivo alguno. Hoy escribiré sobre como, a veces, sonreimos por cosas que cualquier otra persona no vería como motivo para hacerlo. En mi caso, hoy, ha sido una imagen que me ha parecido muy tierna y que me he pasado años esperando ver... los años que he pasado siguiendo Strangers In Paradise.
La imagen la he linkado antes y... debo decir que después de un día regular y, sobretodo, muy largo, me ha parecido muy tierna. Me ha llenado de añoranza por muchos motivos pero, sobretodo, me ha parecido una de esas imagenes que todos quisieramos llegar a vivir (adaptandola a las circunstancias personales de cada uno, evidentemente) en algún momento de nuestra vida.
Como la de aquel número (sería el treinta y algo del tercer volumen) donde se ve a una Katchoo y a una Francine de setenta y muchos años que siguen sonriendose como colegialas enamoradas. O la de un bebé partiendose de risa sin motivo alguno, con toda la inocencia del mundo y sabiendo que no oculta ninguna segunda intención detras de sus carcajadas.
Son imagenes que más tarde, cuando estas hasta las narices de todo y de todos, te vienen a la mente y te hacen sonreir sin motivo alguno más que recordar la ternura de determinadas escenas.
Son el tipo de imagenes que, vengan de un comic, una película o la vida real, te hacen pensar que, tal vez, el ser humano aún tenga esperanza (la esperanza de conservar lo que nos hace humanos y evita que nos convirtamos en monstruos... sabéis a que me refiero).

2 comentarios:

Profesor James Moriarty dijo...

o la de un post, pero sí hay imagenes que cuando las vemos lo minimo que hacemos es levemente cambiar el gesto o incluso te cambian el dia.

Jael dijo...

Mi sonrisa va por tu post :)

Suscribete al Blog